Receta de Msemen marroquí o Rghaif

Msemen, también conocido como Rghaif, son unos deliciosos crepes de origen marroquí planos y cuadrados. Es habitual servir estas tortitas con té de menta como merienda.

El Msemen es un plato norteafricano elaborado con harina de trigo combinada con sémola muy fina para darle textura y sabor. En los países del Magreb, de acuerdo con la tradición, se sumerge en un almíbar elaborado de mantequilla y miel. Además de ser deliciosos cuando están cubiertos con el almíbar, también lo son rellenos de carne picada o queso.

Mucha gente los toman en el desayuno, aunque yo prefiero las famosas tortitas de agujeros baghrir.

Debido a que esta receta lleva cierto tiempo de preparación, suelo hacerlas con antelación y en grandes cantidades, para luego compartirlas con la familia y los amigos.

Aunque los msemen están deliciosos, no recomiendo comerlos todos los días, puesto que tienen un alto contenido en grasa debido a la excesiva cantidad de aceite y mantequilla utilizados en la receta. En cualquier caso, no le aconsejo que reduzca la cantidad de aceite que se emplea en la receta. Puesto que no sería lo mismo.

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Dicho todo lo anterior, vamos con la receta. Toma buena nota y aprende cómo hacer Msemen marroquí, simple y fácil.

Ingredientes del msemen

Información Nutricional

🥣 Cocina: Marroquí

Plato: Repostería

👨🏼‍🍳 Dificultad: Fácil

Cocción: 5 min

Preparación: 5 min

Reposo: 45 min

Raciones: 8 – 12

¿Cómo hacer msemen marroquí?

1. Diluimos la levadura en un vaso con 50 ml de agua tibia. Mezclamos y dejamos reposar durante 10 minutos hasta que se active la levadura.
2. Mientras tanto, en un recipiente grande, ponemos la harina y la sémola fina. Mezclamos con las manos o con un utensilio de cocina. Agregamos el azúcar y seguimos mezclamos.
3. Hacemos un hoyo a un lado y echamos la sal. Cubrimos con la mezcla.
4. El siguiente paso es hacer otro pequeño hoyo, para que la sal no entre en contacto con la levadura directamente. Añadimos la levadura con agua. Empezamos a mezclar con las manos.
5. Añadimos el agua poco a poco, ya que dependiendo del tipo de sémola y harina que utilicéis, puede requerir más o menos. En definitiva, la masa que obtengamos no debe ser ni demasiado blanda ni demasiado dura. El amasado lo podéis hacer con una amasadora.
6. Una vez obtenida una masa un poco pegajosa, la ponemos en el lugar de trabajo. Enharinamos un poco y amasamos durante 5 o 6 minutos. Formamos una bola con la masa y la dejamos reposar en un recipiente tapado durante 15 minutos.
7. Después de 15 minutos, ponemos la masa en la mesa de trabajo. Untamos la masa con aceite de girasol.
8. Dividimos la masa en 10 o 12 porciones del mismo tamaño y las boleamos. Las cubrimos con un paño o papel film transparente y la dejamos reposar durante 15 minutos. Las bolas las puedes hacer del tamaño que quieras.
9. Mientras tanto, derretimos la mantequilla en el microondas unos pocos segundos. Dejamos enfriar y mezclamos con el aceite.
10. Mientras trabajamos en la mesa de trabajo, nos engrasamos las manos y la superficie con la mezcla de aceite. Estiramos una bola de la masa desde el centro hacia fuera, formando un círculo. Engrásese las manos continuamente en la mezcla de aceite y mantequilla. El resto de bolitas de masa las dejamos cubiertas para evitar que se sequen
11. Espolvoreamos con un poco de sémola y doblamos la masa hacia dentro en tercios formando un rectángulo grande. Ponemos mantequilla derretida y un poco de sémola fina cada vez que doblemos.
12.  Ahora doblamos la parte de arriba y volvemos a añadir mantequilla y sémola. Después la de abajo y formamos un cuadrado. Repetimos con el resto de bolas de masa. Una vez formado todos los cuadrados de masa, Cubrimos con un paño y dejamos reposar 15 minutos.
13. Ponemos a calentar una sartén en engrasada con la mezcla de aceite y mantequilla. Con las manos también engrasadas, estiramos los cuadrados de masa, para hacerlos un poco más grandes
14. Añadimos un poco de aceite sobre el msemen antes de situarlos en la sartén. Cocine durante unos 5 minutos, asegurándote que estén doraditos y cocinados por el centro.
15. Cuando estén listos, sácalos de la sartén y colócalos uno encima del otro, para que se conserven crujientes.

Consejos para Msemen marroquí o Rghaif

• Debemos engrasarnos las manos continuamente, pues así se deslizaran más fácilmente sobre la masa.
• Los msemen se conservan muy bien si se guardan en el congelador, una vez que están fríos. A la hora de servir, basta con calentarlos en el microondas unos segundos.

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